En una región del oriente medio, el turismo es abundante; allí existe, como por arte de magia; un pueblecito precioso, tal cual paraíso tropical. Es abundante en flora y fauna; pero como en cualquier población, no todo es color de rosa.
En ese lugar existe una gran banda de asesinos, que trabajan a la sombra del turismo; nunca se les ha visto rondar las zonas turísticas, pero se sabe que están aquí acechando a los excursionistas, y cometen sus fechorías con la ayuda de escorpiones.
En este pueblo pesquero, existe un sendero que se adentra en el espesor de la selva... y quienes le visitan deben de ir acompañados de un guía, para así no desviarse del camino y así evitar cualquier tipo de ataque o emboscada.
Para los incautos hay una pequeña trampa, pues a varios metros del sendero, en el margen derecho, en el espesor de la selva; se encuentran colocadas estratégicamente joyas esparcidas, las cuales pueden ser vistas solamente por los turistas y no así por el guía.
El guía tiene conocimiento de lo que sucede, por lo que previene a las personas para que sin importar, que es lo que puedan ver... nunca se aparten de la ruta establecida.
En presencia del guía, casi nunca se rompe esta regla; pero muchas veces los turistas regresan solos al cabo de un tiempo, para de esta forma acceder a las joyas; pero para esto deberán de desviarse por el camino de la muerte.
Para llegar a su objetivo, deben de cruzar un pequeño arroyo de agua cristalina, el cual poco a poco se va complicando más y más, porque se va cerrando con zarzas. Al final se encuentra un aviso, con la advertencia de que es un lugar habitado por escorpiones y otros bichos peligrosos... más esto raras veces les detiene en su búsqueda por obtener de manera fácil grandes fortunas.
Cuando cree haber "alcanzado el cielo"", porque se encuentran a centímetros de tomar las joyas, abruptamente le caen infinidad de escorpiones, causándoles la muerte.
Cuando son picados, pierden el conocimiento y a continuación una banda de sujetos, los despojan de todas sus pertenencias de valor; inclusive algunas de las víctimas son violadas, por el cabecilla de la banda. Sin embargo, si otro miembro de se atreve a hacerlo, será enviado a la horca por órdenes del jefe, quien es un criminal demente.
Recientemente, en la entrada del pueblo, apareció la cabeza del Armando Cadenas, quien tuvo que pagar alto el precio de su desacato... y así desalentar a cualquier otro miembro que se atreva a desobedecerlo.
Esta banda lleva cinco años delinquiendo... Siempre están atentos a la llegada de millonarios, quienes son fáciles de identificar por sus atuendos y joyas...
A estos, cuando los escorpiones los atacan, se les administra rápidamente un suero, que impide que el efecto del veneno de los escorpiones, termine con sus vidas.
El envenenamiento se produce desde el interior de la víctima, haciendo que toda la materia se convierta en líquido, posibilitando así que el escorpión lo absorba y deje solamente vacío "el cascarón de la víctima. El veneno es lo suficientemente potente, permitiendo que el proceso ocurra rápidamente.
Los criminales también sufren de picaduras, no obstante utilizan el antitóxico... más con cada ataque la dosis debe de ser mucho más potente.
Seguidamente, los sujetos los conducen y retienen en el interior de la selva, para luego comunicarse con sus familiares exigiendo un monto alto de dinero, "por haberles encontrado y salvado la vida"; más una gratificación por tiempo en que les han tenido retenidos en calidad de reposo.
La banda está formada por numerosos maleantes, pero solo matrimonio joven con aspecto angelical y muy amables, son los encargados de cuidar a quienes han secuestrado... y que contarán con la fortuna de dejar con vida.
Después de pagado el rescate, la estancia de las víctimas será de varias semanas; ya que se encuentran muy lejos de la civilización y por ser un camino tercermundista, los guías transitan por esos lares, solamente una vez al mes; porque para llegar al lugar del cautiverio, necesitan hacerlo con motos sidecar de los tiempos de guerra.
Las autoridades están al tanto de todo, pero nunca hacen nada... porque temen ser objeto de ataque y vandalismo.
Cuando se reporta un muerto, simplemente lo declaran como un accidente desafortunado; y cuando se da lugar al secuestro se hacen de la vista gorda.
Quienes lograr sobrevivir a esta trampa, quedan marcados psicológicamente de por vida; pues difícilmente consiguen olvidar el ataque de los escorpiones y el cautiverio.
Estos criminales pertenecen a grandes organizaciones, dedicándose al narcotráfico de estado a estado. Son mafias tremendas, pero su objetivo no es hacer daño al turismo; pues solamente dejan morir a quienes no tendrán para pagar por el antídoto, la estancia en cautiverio y el rescate por haber sido salvados.
La amabilidad es tan grande, que hace sospechar algo siempre.
Ellos creen tener todo controlado, más no tienen idea que al estar expuestos reiteradamente a los ataques de tantas variadas especies de escorpiones, se han puesto en peligro inminente; ya que estos bichos han comenzado a mutar y propagarse por la región; y muy pronto se convertirán en armas letales.
No existirá antídoto alguno para detenerlos, pues serán parte escorpiones y parte humanos; pues se han convertido en escarabajos inteligentes.
Dentro de algunos pocos años, posiblemente morirán muchas personas por el ataque de esta nueva especie de escorpiones; y algunos otros serán gobernados por ellos, sin que se necesite viajar a ese lugar... pues se habrán esparcido por toda la tierra.
Al final, la codicia, de unos pocos; será la destrucción de la mayoría, tal cual acontece en todos los países del mundo.
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Colabora en imágenes,
Silvia Regina Cossio Cámara.
