llorando está entre margaritas,
con su tierno corazón destrozado;
por causa de otra dama maldita...
Que a su amor le ha robado,
Llorando está en su jardín
lamentándose y desconsolada.
Pues le ha robado la vida...
una bruja muy malvada.
Llorando entre margaritas,
Hasta el anochecer,
Con un dolor tan inmenso,
Que no se puede contener,
Tirada entre flores está...
mirando al cielo;
ahogando sus penas por su querer,
pues se le fue su amado bandolero.
Él partió en busca de otra mujer,
y ella tirada en el suelo está
con el mundo bajo sus pies,
se ahogá en su pesar.
¡Ella nada sabe de lo nuevo!
Y nada quiere saber,
si no está su caballero,
en este suelo moriré
pensando por un te quiero,
que jamás podría ser.
Enrique Nieto Rubio.
*Derechos Reservados*
Colabora en imágenes,
Silvia Regina Cosió Cámara.
DV.J.DOIJ.C.OO.98.