lunes, 1 de julio de 2024

..Virus mortal año 5000.(Plagas).capi.1

 









Virus mortal año 5000.(Plagas)capi.1

año 5002  se  desata una gran plaga en un laboratorio

en Francia de ratas infectadas.

Se han escapado matando a todos los científicos, por un error humano. Estas ratas están provocando infecciones a las personas, contaminando los silos de harina  y el pan doméstico, en los hornos de la ciudad, causando grandes enfermedades a las personas. 

año 5005, en Francia en secreto para no tirar estas harinas contaminadas las han puesto más baratas y las están vendiendo por todo el mundo, España, África y muchos más países de Estados Unidos.

Así, en muchos alimentos contaminados por los vómitos de las ratas, además de multiplicarse por millones, entran en barcos, aviones y toda clase de medios de locomoción... Continuará.

Enrique Nieto Rubio.

derechos de autor.

viernes, 21 de junio de 2024

..Hotel de Enricostro. Episodio n1(novela)

  

Delante a un hermoso e imponente hotel, en el bordillo de enfrente; pasaba su tiempo libre... sentado un chico llamado José.

Cada día, después de salir del colegio, comía el bocadillo que su madre le preparaba; luego salía corriendo y se acomodaba siempre en el mismo lugar.

Era un muchacho un poco retraído, y cuando sus amigos le llamaban, él simplemente les ignoraba. Nadie sabía por qué motivo, José gustaba de pasar su tiempo frente al hotel... Algunos decían, que quizás disfrutaba viendo a los turistas entrar y salir.

 

Él jamás había trabajado; sin embargo, un día el conserje del hotel, quien lo conocía desde pequeño, lo llamó: 
*¡Hey Chico... ven!
Luego le preguntó... ¿Sabes qué labor desempeño en este hotel?
-¡Sí! Claro que sí; tú estás para desempeñar el cuidado del hotel, y muchas cosas más.
*Estás en lo correcto José, estoy para todo.
¿Quisieras ganarte un dinérico?
- Sí, me encantaría, contestó el chico.
*Pues, bien, hoy vienen unos turistas, y necesito que me ayudes a ingresar su equipaje.

El chico se sintió muy contento, y se sentó en el escalón del hotel a esperar; en ese momento él se sentía importante... así pues, estaba impaciente y nervioso.

Después de esperar por unos minutos, frente al hotel se detuvo una limusina, y descendieron unas señoritas muy guapas, acompañadas de un señor muy elegante, de buen vestir.

José se levantó inmediatamente, a tiempo que el conserje le daba la orden de ir al coche, y subir todo lo que le indicarán a la habitación.

José respondió, con voz tenue... ¡Como usted ordene, señor!

 

El chico realizó su trabajo maravillosamente, pero mientras iba y venía por las maletas; se percató que las chicas se estaban desnudando, preparándose para darse una ducha.

José entraba mirando de reojo, más nunca sin pararse un instante, y con la cabeza un poco agachada.

En una de sus idas y venidas, cuando el chico se disponía a salir, para ir a recoger más equipaje... escuchó:
*¡Hey chico, chico... ven!
¿Cómo te llamas?
-Mi nombre es José.
*¿Podrías ayudarme a desabrocharme el sujetador, pues se me ha atorado?

José cumplió con la petición; sin embargo, se sintió morir, cuando colocó sus manos, en el cinto... junto a la espalda de la hermosa chica; pues percibía su belleza, su olor, la tersura de su piel... y la cercanía con su cuerpo.

 

Todo lo que estaba viviendo, eran experiencias y sensaciones nuevas para él.

Así que el muchacho, con mucha delicadeza y casi sin tocarla, introdujo sus dedos y desabrochó el sostén; la chica agarrándose el sujetador con una de sus manos, se volvió y le dio un beso, como gesto de agradecimiento.

La chica no era mayor que él... más el pobre quedó paralizado... y de nuevo, con la vista al suelo, dio dos pasos atrás, en señal de respeto.

De pronto escuchó una voz varonil, preguntando:
¿Chico ocurre algo? 
José reaccionó y solamente respondió que estaba por retirarse, y así lo hizo... se marchó para continuar sus labores.

 

Cuando subió todas las maletas; la última era la del señor que las acompañaba... quien agradeció su arduo trabajo como botones; más no sin comentarle, que había tenido que esperar, por mucho tiempo, por su equipaje.

El chico se disculpó por la tardanza, informando que solamente él estaba disponible para realizar, dicha labor.

Cuando José se dio la vuelta para marcharse, el hombre se dirigió a él de nuevo, diciendo:
¡Chico espera!
José se dirigió hacia él y se quedó parado.
-¿Cómo te llamas?
* José señor.
-¿Buen trabajo, José, toma esto para ti; pero no se lo comentes a nadie?

 

La propina que recibió fue un buen fajo de billetes; José agradeció y se los guardó en el bolsillo, sin darle mayor importancia.

Este hombre lo percibió un chico maravilloso, pues fue testigo de la forma correcta en que se había comportado con la chica; así que le entregó diez dólares más... y le advirtió que si le preguntaban, cuánto le había dado, mostrará únicamente la modesta propina.

*José de nuevo agradeció modestamente, y luego se retiró agregando que si necesitaba algo más, se encontraría sentado en el bordillo de enfrente del hotel.

El hombre quedó extrañado con la respuesta, pues no sabía que el chico no era empleado del hotel.

 

Minutos después, Antonio, que sé así se llamaba el huésped; se acercó a la ventana, y se dio cuenta de que el chico se encontraba sentado enfrente del hotel, tal cual le había informado.

Intrigado llamó al conserje por el teléfono y le dijo:
-¿Podría enviarme al botones, de nuevo, por favor? 
*¿Perdón... a quién necesita?
-Al botones... al chico que subió el equipaje.
Para ese momento ya eran las ocho de la noche, por lo que el chico se había marchado a casa... y volvería hasta el día siguiente, a eso de las cuatro de la tarde, luego de salir del colegio... pues esta era su rutina, día con día.

Siendo así, fue el conserje quien subió a la habitación. Tocó a la puerta y preguntó:
-¿Señor, en qué puedo servirle?
*Realmente no necesito nada, gracias. Solamente necesitaba hablar, con el  chico que subió las maletas.

El conserje intrigado preguntó:
-¿Se ha perdido algo, señor?
* No...no es nada de eso, no debe de preocuparse.
-  pues la verdad es que ese chico es tan solo un vecino de estos lares, y necesité pedirle su ayuda hoy por la tarde. 
*Si es así, no hay más que hablar. Puede usted retirarse.
-Gracias, señor; más si necesita algo, por favor no dude en llamarme.

Mientras tanto, el chico Jose llegaba a su casa; se dirigió a su dormitorio muy contento, y en una caja de zapatos, guardó su ostentosa propina... más no le dio mayor importancia.

Se lavó las manos, bajo las escaleras y se fue a cenar en compañía de sus padres.

El papá no trabajaba desde hacía algún tiempo, pues estaba jubilado; pero económicamente vivían muy bien, ya que había sido un funcionario importante. 

Los padres sabían que su chico estaba un poquito tocado, pero nada para alarmarse; pues el único problema era que tartamudeaba un poco cuando se ponía nervioso. Pero en general era un chico maravilloso, pues era buen estudiante, obediente y sobre todo; poseía un gran corazón, y daba todo... a quien le necesitara.

Continuará…

Enrique Nieto Rubio 

*Derechos Reservados*

..Hotel de Enricostro.cpu.9.

 



La vida le sonreía a José y Anita, el hotel contaba con empleados profesionales, quienes cumplían sus labores a la perfección; por lo tanto, decidieron contratar a un gerente de operaciones, y así disponer de más tiempo libre para disfrutar de su romance.

Anita era una mujer realmente especial, amaba con devoción a José, y día con día lo sorprendía con nuevos detalles. José se sentía engrandecido y él le correspondía consintiendo sus pequeños caprichos.
Para ese momento, José tenía su vida resuelta; y deseaba comenzar una familia al lado de su amada.
Decidió sorprenderla; así pues, la invitó a dar un paseo en avioneta... y para tremenda sorpresa de la chica, cuando volaban sobre un campo de golf; vio un mensaje realiza do con rosas blancas, que decía:
Anita te amo... ¡Quieres casarte conmigo!
La joven emocionada no pudo contener el llanto, lo llenó de besos y abrazos, y le confesó que desde hacía mucho tiempo, ella soñaba con ese momento.
Al día siguiente viajaron treinta kilómetros, hacia la ciudad madrileña, Alcalá de Henares; pues allí vivían los padres de Anita.

José invitó a sus futuros suegros a almorzar, y les pidió la mano de su amada princesa; ellos accedieron inmediatamente, pues sabían que su hija lo amaba infinitamente.

Alcalá de Henares fue declarada, Patrimonio de la Humanidad; así pues, después visitaron algunos de sus bellos parajes.

De vuelta al hotel pasaron visitando a los padres de José, para darles la noticia, y ellos también les otorgaron su bendición; pues para ese entonces ya querían a Anita como a una hija... pues sabían que ella una chica excepcional.

Es más, los padres de José, siempre se cuestionaban, si la presencia de la chica en la vida de su hijo; había contribuido a que desapareciera el problema de tartamudeo, que afectaba a José. Pues él nunca más tuvo trabas al conversar.

Acordaron que la ceremonia se realizaría en dos meses, tiempo en el cual, con suma ilusión, juntos compartieron la experiencia de organizar cada detalle de la boda.

Casi en todo concordaban, más Anita deseaba casarse en la playa, y José en el teatro del hotel... al final ambos cumplieron su deseo.

La boda civil se celebró en la playa, un día viernes justo al atardecer. A este evento acudieron, solamente las personas más cercanas a los chicos... a lo sumo serían cien. Entre ellos, don Ricardo con su esposa, quien logró el perdón de su familia; ya que después del incidente en el hotel, pasó a ser uno de los mejores amigos de José.
El lugar fue decorado de forma sencilla, pero con gusto exquisito.
Las sillas forradas de blanco, en medio una hermosa alfombra con pétalos de rosas, en esta oportunidad de color carmesí... al fondo, en el lugar donde se encontrarían los chicos, una hermosa pérgola con telares al viento; como fondo el hermoso azul del mar, quien con su oleaje parecía rendirlas tributo, con delicioso cantar. Y como guinda sobre el pastel, un majestuoso cielo se lucía, con hermosos colores pastel.
Después de la cena, presenciaron un espectáculo realizado por malabaristas de antorchas; al final terminaron cantando y danzando alrededor de una hoguera... casi hasta el amanecer.

Ese mismo día, a las seis de la tarde, se llevó a cabo la boda religiosa. Don Antonio y su señora, fueron los padrinos de boda; y las modelos fueron las damas de honor.

La ceremonia se llevó a cabo en el teatro del hotel, y fue precedida por el sacerdote de la Parroquia de Jesús de Medinaceli.

¡El salón de espectáculos, lucía más radiante que nunca... bla, bla, bla! ¡Imposible mis amigos relatar los detalles!

¡Porque si certero es, que la fiesta de reinauguración fue por demás colosal... los chicos para este evento, tiraron el hotel por la ventana! ¡Jajajá!

¡En esta ocasión mi relato, termina como en todo cuento de hadas... pues comieron perdices y fueron felices para siempre!
Enrique Nieto Rubio.
derechos de autor.
-Fin-

..Hotel de Enricostro 8 capi.

 






José, al día siguiente del "problema", que enfrentó con don Ricardo... antiguo huésped del hotel; debido al mal uso de las cámaras de vigilancia; convocó, con carácter de urgencia, a todos los trabajadores.


Dicha decisión la tomó, para evitar que en el futuro; se diera lugar... a malas interpretaciones.

Cuando todo el personal, se reunió frente al hotel; les informó, que tenía algo de suma relevancia para comunicarles... diciendo:Señores, señoras y jóvenes en general; les he citado para informarles que el hotel, está monitoreado por cámaras de seguridad las veinte y cuatro horas del día. Las grabaciones que se realizan, sirven para proporcionar seguridad a nuestros huéspedes, así como la de nosotros mismos.
El equipo de vigilancia ya estaba instalado, cuando se compró el hotel; y seguirá funcionando porque consideramos que son de invaluable apoyo, en todo lo concerniente en el tema de seguridad.
Dicho esto, deseo aprovechar la oportunidad para confesar, que me siento orgulloso de todos ustedes; pues desde que el hotel abrió nuevamente sus puertas; han sido despedidos solamente dos trabajadores.
Uno de ellos, era un guardia de seguridad, quien infringió las normas del puesto que desempeñaba; y la otra fue una señorita del departamento de limpieza, quien fue responsable de sustraer el reloj de un cliente.
Así mismo, deseo compartirles que, en su momento, nos encontramos con la penosa necesidad, de desalojar a una huésped; quien ejerce la prostitución... más su delito no fue su oficio; sino que... el de utilizar este hotel para desempeñar "sus labores".
Otro punto qué deseo destacar, y que también me llena de orgullo y satisfacción, es que el personal que aquí labora; goza de los mejores salarios y prestaciones, en comparación de cualquier otro hotel; por lo tanto, considero, que merecemos el mismo aprecio, respeto y lealtad por parte de cada uno de ustedes.
Les exhorto a que continúen trabajando honestamente, como lo han hecho hasta el día de hoy, y les aseguro que conservarán sus puestos...
Ahora bien, nadie está obligado a permanecer bajo estas condiciones, por lo tanto... si algunos de ustedes, no están de acuerdo con lo anteriormente expuesto; este es el momento de decidir, si continuarán a nuestro lado.
Por unos segundos el silencio fue total; pero pronto fue quebrantado, por una ola de aplausos y gritos... vitoreando:
¡José, jefazo!... ¡Como usted, no hay nadie igual!
José agradeció el apoyo y las muestras de cariño y consideración; y les invitó a continuar con sus labores; más no sin antes expresarles su apoyo incondicional... expresando:
Agradecería, que si en alguna situación específica, alguno de ustedes tiene un problema, o hay algo que les incomoda en el hotel; no tengan temor de acercarse a Anita, o a mi persona... y así tomar las medidas correspondientes, para remediar lo que sea preciso.
¡En ese momento, una chica, tímidamente, alzó la mano y preguntó!:
¡Don José, solamente quería saber, si también nos graban, cuando nos cambiamos de ropa!
La respuesta de don José, para muchos, fue más que inesperada... pues respondió categóricamente:
¡no, señorita, en sus vestuarios la privacidad es absoluta, pues me encargo personalmente de revisar esos vídeos! ¡Además, podéis estar seguros, que con esto...no estamos yendo contra ninguna normativa, o quebrantando la ley!
Luego preguntó: ¡Señorita, si no está de acuerdo, me gustaría saber si acaso! ¿¡Tiene algo que ocultar!
La chica se sonrojó... era evidente su molestia, más se limitó a guardar silencio.
Don José no pudo controlarse más, y comenzó a reír divertido por la expresión, de todas las mujeres presentes. ¡Jajajá!
¡Que es una broma niña! Anda ven y sube aquí... al llegar cerca de él, la recibió con un fuerte abrazo. Desde ese momento, la chica y demás empleadas se sintieron más que protegidas.
Al presenciar esta broma, que fue como un gesto de compañerismo por parte de don José; de nueva cuenta, los empleados emocionados comenzaron a aplaudir... y José intervino alzando la voz:

¡Ya vale!... ¡Venga, que todos necesitamos ir a trabajar! ¡Sí!
Desde ese día, nunca más volvió a ocurrir otro incidente en el hotel; excepto que, de vez en cuando, se extraviaba una maleta en las afueras del hotel, y alguno que otro problema, pero nada concerniente a la seguridad.
Continuará...