Solitaria estás mujer,
por un amor desdichado,
que aunque te agarraste, fuerte a él,
su amor no te ha llegado.
*
En tu sillón de los sueños,
tú suspiras por él,
mientras él piensa en otra,
tú nada podrás hacer.
*
Pero tú no te preocupes,
que el amor renacerá,
y vendrán días hermosos,
de amor y felicidad.
*
Que nunca nadie se quedó,
sin un amor al que cuidar,
teniendo como tú tienes,
tanto amor por entregar.
*
Enrique Nieto Rubio.
Derechos reservados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario