viernes, 12 de abril de 2013

..Toma esta rosa,de Enricostro.


¡Ay esposa mía!,
 Que en los huesos me he quedado...
toma esta rosa mi amor,
 para que vivas a mi lado.

Tanto tiempo trabajando,
 y viviendo por y para ti;
ahora no quieres esta rosa,
 pues no te quieres morir.
Mira si fuiste fina,
 que tu café yo me he tomado...
¡Te fuiste a la otra esquina!
 y contra la pared,
 yo me he estrellado.!

Toma esta rosa mía;
 y por favor no me hagas más padecer;
que los huesos se me enfrían,
 si no tengo más tu querer.
Anda amada mía,
 y vente tú conmigo,
 que muy solito estoy;
pues duermo tan poquito,
 que ya no noto la candidez...
de ese cuerpo de esposa,
que yo sentía a tu ladito.
 

Anda y quédate la rosa,
 que por mis huesos tú estas...
y yo te daré otra cosa,
 que prometo te gustara de verdad.
Anda y no seas tonta,
 y vente tú conmigo,
que jugaremos a cosas,
a cosas a aquí escondidos.
Enrique Nieto Rubio.
*Derechos Reservados*
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.

martes, 9 de abril de 2013

..Vanidosa eres mujer, de Enricostro.




Vanidosa eres mujer...
cuando me acerco a ti 
 y nada quieres hacer.

Tu corazón es piedra...
¡Sí! De piedra y de hormigón;
porque cuando te digo te quiero,
  tú me ignoras con pasión.

Mírate mujer vanidosa,
 en el espejo de la verdad ...
Observarás un ser de piedra;
 como único tesoro tus joyas,
 perlas y cristal.

Solo tienes ojos para ti...
Solo quieres,  tu pasión...
y me tienes como a un perro,
Abandonado en un rincón.

Nunca me dices te quiero,
nunca me dices que sí,
solo piensas en tus juegos,
que me separan de ti.

¡¿Cuántas veces te he llamado?
  ¡Y  me sigues ignorando!
Después dices que me quieres,
pero sigues caminando.

Presumida eres mujer...
solamente te quieres a ti,
y por más que te suplico,
nunca me dices que sí.

Muchas  rosas te he enviado...
muchas rosas de pasión,
Y tú las has despreciado,
  dejándolas en un rincón.

¿Cuántas noches te he pedido?
¿Que  me hicieras feliz?
Y tú con tanto  olvido,
... ¡Sigues pasando de mí!

Vanidosa eres mujer,
 que solo con tus alhajas,
 puedes ser feliz;
Y yo tu amado... 
bajo tus pies;
pero sin dar nada para mí.




Enrique Nieto Rubio.
derechos de autor
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.

lunes, 8 de abril de 2013

..Como la flor del almendro de Enricostro.


Así como la flor del almendro, 
así crece nuestro amor;
pues tu mujer, me llenas,
 de deseos y me colmas, de pasión.


Como el néctar de las flores,
 dulce y exquisita... así eres para mí;  
que con gusto te comería,
 hasta los huesos, para poderte sentir. 
Mira chiquilla si eres bonita...
mira si eres hermosa,
grande como una diosa;  
que hasta las margaritas,
 te envuelven y cantan,
 apacibles melodías hermosas.

Exquisita flor de almendro eres tú,
 y de almendras vivo yo; 
que ansío agarrarme a tus ramas,
 para dulcemente hacerte el amor. 
Que ese amor se mantenga,
 puro y verdadero,
 para enraizar yo contigo; 
floreciendo cada día con tus besos, 
y así vivamos felices los dos. 

Viviremos en un mundo mágico,
 que será nuestro jardín de los sueños. 
Y así estar a tu lado...
 en ese lugar sagrado;
 hasta el fin de los tiempos.

Enrique Nieto Rubio 
*Derechos Reservados*
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.



sábado, 6 de abril de 2013

..Quiero sentirme de Enricostro.




Quiero sentirme,
 en todas tus noches de ensueño... 
Deseo besar tus labios,
 como si fuera la última vez. 

Quiero mirarme en tus deseos, 
y que ellos me abrasen. 

¡Cuánto te quiero!
 Que las noches, se me hacen eternas,
Si no te tengo a mi lado, 
las mañanas son amargas, 
Si no estás conmigo.

 las tardes se tornan todas grises. 
Si no vives en mi interior,
 el llanto se vuelve eterno, 
Si no te veo, sufro...
¡Y es que te quiero, tanto, tanto!
que sin ti, me siento morir.
Por ti cambiaría el universo,
 por sentirte a mi lado,
No tienes idea de cuanto te deseo...
 ¡Es hasta morir! 
Anhelo que me envuelvas,
 y arrullé entre tus brazos... 
pues tu calor me da la vida;
 ya que sin ti no la tendría. 
¡Ámame, no me digas que no! 
Que la vida pierde sentido, 
si no contamos el uno con el otro;
 y con nuestro dulce amor. 

Sentimiento que vive en mí, 
como cierto es que muero por ti. 
Toma lo que soy y mis sentimientos;
 que los tuyos yo los tomé.


Te amo, y nunca me iré de ti;
 porque de ti yo tengo el viento.
Tus suspiros son mi sentir,
 tus gemidos mi vivir y tu llanto mi sufrir.
 
Háblame, que tus palabras son gloria,
 y que en la gloria soy feliz. 


Tu mi fiel compañera,
 que yo muera a tu vera...
 ¡Para no verte infeliz! 


¡Porque tu dolor es mi abrigo!
 y tu alegría es mi pócima de felicidad!

Enrique Nieto Rubio
*Derechos Reservados*
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.