lunes, 21 de octubre de 2013

..Carta envenenada de Enricostro.


Hola mi amor... visto que me es imposible, 
resistirme ante tus encantos fotográficos, 
mis deseos hacia ti son cada vez más intensos.
Te amo y esto no lo cambia nadie, 
si ya eres para mí el viento de la mañana, 
mi aperitivo en la sobremesa; 
mi desayuno al levantarme.
Y si es al anochecer eres todos mis sueños juntos, 
te deseo a morir, y cuanto más te miro más te deseo, 
no me puedo resistir.
Lo mismo camino hacia tu hogar y te rescato, 
de las garras del destino... 
que lo mismo no era el mío, 
y te haría el amor intensamente hasta la muerte.
Sí... supongo que sería mi muerte, 
pues como dos caballitos del diablo, 
o Santa Teresita, como se conoce también, 
te haría el amor tan intenso.
Que tu la muerte me dieras después. 
para así vivir la eternidad junto a ti, 
no me pidas que me vaya, 
no me digas la verdad.

Que vivir en la mentira, 
es cosa de bienestar, 
no me pidas que me aleje, 
pues sin ti me moriré.
Déjame estar contigo, 
amada de mi querer, 
pues sin ti mi amor se muere, 
pues sin ti no sé vivir.
Pues sin ti mi alma se pierde, 
en las sombras del sufrir, 
no me pidas que me aleje, 
que después no sabré volver.
Me provocarás la muerte, 
princesa de mi querer, 
cuántas veces yo te amé, 
y me decías que sí.
Ahora me das la muerte, 
y no me quieres sentir, 
que ya vives con otro, 
y que yo ya no soy nada.
Y me cierras la puerta, 
dejándome en soledad, 
yo maldigo a la suerte, 
de ese que te encontró.
Apartándome de tus redes, 
dejándome sin pasión, 
ahora ya vivo la muerte, 
rosa de mi corazón.
Enrique Nieto Rubio.
<Derechos de Autor>
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.

viernes, 18 de octubre de 2013

..Con una niña de Enricostro.


Con una niña va caminando,
por la senda de la vida...
Cantando cosas hermosas, 
canciones con alegría.



Al cruzar nuestros caminos,
me acerqué y le pregunté, 
¿Dime el porqué, de tanta alegría? 
Ella me respondió:

¿No lo ves?
Es mi niña... el alma mía, 
que me llena de ilusión y 
que me da una nueva vida.


Es que me muero por ella...
Es la luz de una nueva alegría, 
y un nuevo renacer, 
para otros nuevos días.


Y cantando se marchó,
esta señora divina, 
con esa carita hermosa 
llena de paz y de vida.





Enrique Nieto Rubio
*Derechos de Autor*
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.

..En el camino de las ciencias.


En el camino de las ciencias,
 yo estudié para ti, 
fui buscando el calor cito,
 que produce tu sentir. 
Y como no lo encontraba,
 llame a un hada buena; 
y con su cara de pena,
 ella me contestó:
- Su querer es tu querer,
 pero tú no estás en él. 
Yo furioso me comporté;
 con rabia y con furor... 
El hada inmediatamente me refuto: 
- ¡Si tú ya tienes un amor!
Más de nuevo, con rabia,
 le cuestionaba... 
¿Y no puedo querer a dos? 
- Con tres te caerías,
 de la cama... ¡Solo son dos! 
Tres es tontería,
 así no se hace el amor. 


¡Es que me muero por ella!
es que la quiero a morir! 
El hada me respondió:
- Con dos cucharas no se come, 
una tendrás que coger,
 y para probar la sopa, 
en caliente no puede ser,
 te quemarás la boca, 
y te dolerá después.
¡Ay hadita presumida!
 tú no me dejes así, 
que esa niña es divina,
 que me tiene loco a mí. 
¿Pero no ves que preciosa es?
 ¡Bonita para rabiar! 
Tiene cara de rosa,
 y huele a aroma de azahar. 
- Niño, me estás hartando...
¡Me tienes lo quita ya! 
Quédate con las dos,
 y vete a cascarla ya; 
y no me llames otra vez,
 o guantazos te ganarás 
capullo de niño. 
Y cuando estéis tres en la cama, 
verás como te caerás,
qué tres es multitud, 
Anda y entérate ya
Enrique Nieto Rubio 
*Derechos de Autor*
Colabora en imágenes,
 Silvia Regina Cossio Cámara.

miércoles, 16 de octubre de 2013

..El fin de la vida en la tierra de Enricostro.



 Hoy he recibido un mensaje de Internet un poco extraño.

Hoy es diez de febrero del dos mil diez, y el mensaje empieza así:
Es el año cinco mil veinte.
 Yo, Gonzalo Sánchez de Puerta, escribo hoy, primero de enero, del año cinco mil veinte.
Hoy el mundo se muere de hambre... los científicos se desviven por encontrar vida en otros planetas, en otras galaxias.


Las noticias de hoy son las siguientes, mientras millones de personas están muriendo de hambre en el mundo, los científicos se gastan miles de millones, de euros en experimentos.


La verdad es que en este mundo, ya no hay recursos alimentarios para todos, pero las autoridades no dicen nada.


Hoy, treinta y uno de enero del año, cinco mil veinte, un experimento que los españoles, han creado en acuerdo con la nasa y la plataforma europea más china.


Han creado, cuatro radiotelescopios de más de veinte kilómetros de diámetro cada uno, en la cual se han instalado alrededor de la tierra, uno en cada hemisferio.

Estos aparatos se han conectado entre sí, creando una circunferencia alrededor de la tierra, la gran potencia creada, ha sido capaz de divisar grandes mundos con vida, tan lejanos que quizás no lleguemos nunca, pero están ahí.

Durante unas semanas el experimento ha sido un gran éxito; pero a la tercera semana se ha ido creando una circunferencia, alrededor de la tierra de más de cuarenta kilómetros de ancho; de un color amarillo chillón, con una intensidad tremenda.
 El cielo parecía reventar, pues algo malo pasaría, se veía venir.

Las ondas electromagnéticas chocaron contra el sol por un desvío del radiotelescopio, el sol las ha devuelto a la tierra multiplicadas por un millón de kilos frecuencias.
¡Ha sido una gran catástrofe! Yo jugaba con mis nietos a los cohetes espaciales, he hecho un casco de plomo para jugar con ellos, de pronto se ha oído una explosión tremenda en todo el mundo.
Todos perdimos el conocimiento... me desperté de noche y todo se había derrumbado.

De mi familia no ha sobrevivido nadie. Salí de los escombros como pude y en la calle era desolador, todo se había derrumbado; edificios ardiendo, pero ni un alma se movía, es como si la tierra se hubiera quedado sorda o quizás era yo. 


Gritaba y me oía, pues no era yo... había grandes incendios, cogí mi coche y marché por la ciudad. Nadie se movía, miles de personas estaban tiradas en los suelos; los aviones están estrellados en la tierra y las fábricas se encuentran ardiendo. 


Los coches están llenos de personas, como si estuvieran hipnotizados.
 No se escucha nada... Después de tanto deambular por todos sitios, he entrado en unos grandes almacenes. ¡Es espantoso! Como si estuvieran todos durmiendo en el suelo.

A las personas solo se les ve algo de sangre por la nariz y los ojos; he decidido apoderarme del centro, hay de todo, aunque estoy aterrorizado y cagado de miedo; creo que el casco me ha salvado de este caos. A todos los seres humanos de la tierra, incluidos los animales, les ha reventado el cerebro o algo así.


He sacado a la calle, por lo menos cincuenta personas del centro, incluida una tienda de animales, siendo ellos perros gatos e incluso hasta los peces están flotando en el agua. Todo lo he sacado fuera, pues pronto se empezarán a descomponer.


He cerrado todo lo que he podido, en el centro están todos los televisores puestos, pero no emiten señal alguna.

En el mar supongo que habrá, millones de peces y ballenas estarán flotando, es terrible, creo que estoy solo en todo el mundo.
 Tengo que pensar... no consigo pensar nada, estoy andando sin rumbo por el centro, no sé qué voy a hacer.

Bueno, de pronto he apagado todos los televisores, menos uno por si acaso, y he puesto una emisora de radio, aquí, pues la tienen instalada en el centro; he apagado casi todas las luces para ahorrar energía.


No sé cuanto duraran encendidas, la verdad estoy más aterrado todavía, al encontrarme en este centro tan grande y solo.
 Sigo paseando por el centro, pues aún me quedan sitios por mirar.

¡En los cines, que lastima, montones de jóvenes sentados como si estuvieran viendo una película de amor, pero!:
! Oh!... Estoy destrozado, algunos abrazados, incluso me he armado de valor, he cogido una carretilla de las que tienen en el almacén, y he dado cinco viajes hasta la calle, los he tumbado a lo largo de la acera ¡No puedo hacer nada!


He seguido andando, entró en una sauna... más no tenía ni idea, pues está al lado del cine, es la última del centro, por mirar... Bueno, bueno ahí cuatro chicas desnudas. ¡Qué lástima! Pues están buenísimas todas.


Se me ha ocurrido intentar algo. Las he llevado para arriba, pues ahí hay varias camas, las he tumbado a las cuatro, les he echado unas sábanas encima de su cuerpo.

He llevado a las chicas a una tienda de ropa de las que hay… aquí, y las he puesto en una cama que he traído; voy a intentar... si las puedo mantener con vida, pues los cuerpos, aunque el cerebro no funciona, el corazón les late todavía.
Y están embarazadas. 

Millones de personas morirán de inanición en todo el mundo, ya que son como vegetales, serán en pocas horas. 


Me dispongo a darles líquidos y triturados a ver qué pasa, pues que se extinga la vida en la tierra es horroroso, ya es muy tarde y estoy destrozado, me he echado yo también.

Solo se escucha un ligero ruido del televisor, que está arriba, solo eso. 

Ya es por la mañana, a las chicas les pongo la cara en el pecho y les oigo el corazón latir... aunque muy despacito. 

Les voy a dar leche con unos botes que tengo aquí, que le aprietas y salé a chorro, con un tubo que tienen dentro...es trabajo de chinos.
¡Cuánto me está costando que traguen! Es muy difícil, dos chicas tienen peor cara... bueno tengo que esperar para ver si reaccionan. ¡No sé qué va a pasar!


Hoy tengo todo el tiempo del mundo para dedicarlo a estas personas... Hablo con ellas aunque no me oigan. La tarde es muy larga y me entretengo también escribiendo, en este ordenador. <Para mandarlo a ningún sitio> 


Quizás al pasado si pudiera... para avisaros de lo ocurrido.

Bueno, ya es muy tarde, me voy a la emisora a ver si contacto con alguien.

Estoy tocando todos los canales y nada, me he vuelto a acostar... Son las cuatro de la madrugada y estoy muy cansado. 

Al día siguiente he vuelto a calentar leche para las chicas, consigo dárselas, pero una chica ya no le pasa nada... ¡Está prácticamente muerta! La voy a sacar a la calle, con todo el dolor de mi corazón.


Ya en la calle huele a cementerio. ¡Es un olor espantoso! Hay gusanos por todos sitios... esto en lugar de dar asco... Da miedo, un miedo horrible; estoy aterrado, no sé qué va a pasar todavía.


Aquí dentro huele poco... pero algo raro huele, he tapado todo lo que he podido, la temperatura en la calle es muy elevada, hace un calor horrible para estar en invierno.


Miro a través de la puerta de cristales y el día es extraño; está nublado, pero con un tono rojizo y el aire es muy espeso al punto que cuesta respirarlo.


Bueno seguiré con las chicas, tengo que mover las para evitar que la sangre deje de circular....... he montado una cama de esas que vibran.

Está en el escaparate, la estoy probando y se mueve muy bien, he puesto a las chicas encima y le he dado al botón, me he hartado de reír viéndolas como sus cuerpos se mueven para todos lados, los pechos les están votando a las tres, y con los botes están las tres apelotonadas entre sí. 

Parecen que están haciendo guarrerías, están de lo más graciosas, y me estoy girando con ellas.

Bueno, les daré unos meneos dos o tres veces al día.
Parecen como si estuvieran bien........ les tengo cerrados los ojos, pues mirándome fijamente y sin parpadear me dan un poco de miedo, prefiero que se vean como si estuvieran durmiendo.

Ya es muy tarde me he acostado. Ya ha pasado algún tiempo y me siento solo, me he acurrucado entre las dos; la verdad es que están muy ternitas; les he puesto la mano por encima. ¡Joop! Me he topado con un pecho.

Ya ha pasado un mes y seguimos lo mismo, pero las chicas no empeoran, están estables, eso es bueno, hoy me   estremezco 
mirándolas, estamos todos juntos y revueltos....... solo me río, no voy a llorar... ¿Verdad?

Ya han pasado seis meses, tengo dos chicas con los pechos muy gordos y la barriga también; están dos embarazadas.

 Ahora me está entrando la cague ta, nada más de pensar cómo van a dar a luz.
Si no responden siquiera... bueno, ya veremos lo que pasa; si se me mueren. ¡Mala suerte!

Lo tenía que intentar... ¿O no? ¡No lo sé!


Bueno, ya están muy gorditas, me da miedo, ya una está bastante gorda, por lo que yo he visto en los libros, si no salé solo habrá que meterles las manos dentro.


Esta chica tiene lo de abajo muy gordo, creo que es el bebé que viene. ¡Yo qué sé! Mira lo que sea, la he llevado a otra cama y le voy a meter las manos, pues creo que es la cabeza la que está aquí... He metido las manos, esto está calentísimo.


¡Oohh!... Qué asco... estoy cogiéndole la cabeza y estoy tirando despacito, esto está tremendo de grande, meto las manos más hondo, les estoy cogiendo los hombros y ya casi está afuera.

¡Guau!


¡Ha salido! Cuánto caldibache ha salido de aquí, me he puesto perdido de todo ¡Ahahh! Estoy cortando el cordón el chico, parece que está bien... ¡Es un milagro! Por fin un ruido en la tierra... Qué alegría me da. ¡Es precioso!

Estoy dando saltos de alegría, llora un montón. ¡Oh! ¡Sonidos nuevos que bien! Al bebé lo he colocado justo en el pecho de su madre, para que pueda mamar la leche. 

Parece que responde bien; un peso de encima que me ha quitado.

Es muy tarde ya, y solo se escucha el ñaca, ñaca del bebé, que hace al succionar con su pequeña boquita...

Me había acostado entre las mamás y el bebé... casi de inmediato he quedado rendido...

De pronto me ha sobresaltado un ruido, y sentí que el corazón se me iba a salir del susto; el bebé también ha empezado a llorar, porque se ha asustado también.

Me he levantado a escuchar para ver de dónde viene el sonido.


¡Es de la parte de arriba! Creo que es la emisora de radio transmitiendo algo. He subido al lugar... pero no se oye nada; me había parecido escuchar la voz de una mujer. Me he sentado a esperar; más de nuevo me he quedado dormido.
Al rato otra vez escuchaba: ¿Hay alguien ahí? ¿Hay alguien ahí? 


Sobresaltado otra vez, cogí el micro y respondí: ¡Sí!... Si ¿Me oyes? 


- Si te oigo dijo ella... ¡Ah, qué alegría sentí!

Le pregunto: ¿De dónde eres?
-Ella me dice que es de Venezuela, pero vive en Francia. ¡Qué lejos!
-Y tú me preguntó... Yo de España en Córdoba. 


Le pregunté: cómo se llama, y me dice Laura Escobar. 


Yo contesté: ¿Gonzalo Escobar Gabiria? Ajájá! 


Luego de las debidas presentaciones, le he preguntado si sabe si hay alguien más con vida; me ha respondido: ¡No! Solo tú y yo, y me gustaría estar contigo, pues estoy muy sola y la verdad muy asustada. 


Acto seguido le cuestioné:
¿Tienes carnet de conducir? - Si recién sacado.
¡Qué edad tienes? - Dieciocho!
UFF ¡Qué joven eres! 


Ella me ha preguntado la mía, y yo le he dicho: Algo mayor de cuarenta.
Bueno... ¿Qué hacemos?...me preguntó Laura.
- Mira Laura, si puedes, tienes que ir a un cuartel de la policía o bomberos, y coger un coche en buenas condiciones y con emisora para tratar de contactar a otros; pues yo no me puedo mover de aquí, porque tengo dos mujeres y una está a punto de dar a luz y además tengo un bebe que cuidar.

-¡Tío no has perdido el tiempo! 
no si no son míos ellas ya estaban así.
Ya han pasado algo más de dos años de la catástrofe, así que cuando encuentres el coche me llamas por medio de la emisora... ¿Vale?
-Sí, sí, así lo haré!


Ok. ¡Solo fíjate bien el canal que tienes ahora y no lo olvides!
¡Venga!


Ya en la calle no huele mal, de todos los cadáveres solo quedan los huesos; ya apenas queda nada claro. Se tendrá que limpiar el mundo, pero yo no lo haré... la vida ha empezado a nacer otra vez, pues de los cuerpos putrefactos han salido gusanos y palo millas; esto me hace sentir que tengo la tensión por las nubes.

La otra mamá está a punto de parir; y es desconcertante y extraño ver su cuerpo sin movimiento alguno... pues a pesar de los terribles dolores que, causa en las mujeres la llegada de un bebé, que está a punto de nacer... ella continúa inmóvil. 


Me dispongo a meterle las manos otra vez, a ver si tengo suerte. Rezo para que todo salga bien, y luego de batallar un poco el bebé salé... ¡Oh! Sí, sí... ¡Es otro hermoso niño!



¡Qué alegría llorando está!
Augh! El otro también viene en camino; ahora más confiado, realizo los mismos procedimientos y por fin a este mundo llega muy sano y llorando también.


¡Es precioso! Estoy lleno de alegría... ¡Joder que bien ha salido todo! Perfecto, el destino está conmigo.

Días después recibí la llamada de la chica ... subí emocionado y tan rápido como pude las escaleras.

¡Oh! ¡Emocionada, exclamó:! ¡Me alegro mucho, muchísimo!

Acto seguido me preguntó: ¿Está muy lejos Córdoba desde aquí? 

Contesté: ¡Sí mucho! Te lo tendrás que tomar con paciencia, y no quieras llegar antes. 


Descansa y cuando estés cansada no corras; no quisiera perderte antes de haberte conocido. 

Y agregue: Mira haremos una cosa...   ya nada me impide seguir aquí; por lo que iré yo hasta Madrid, y esto nos acortará la mitad del camino. ¿Vale?


- Ok... Entonces búscame en la plaza de España, pues no conozco el lugar, pero ese me será fácil de identificar.
-¡Vale, entonces allí nos veremos!


Así será... más por ahora me despido porque ahora tengo que preocuparme por mis bebés llorones, pues los quiero a morir.


Muy cerca de donde me encuentro, hay unas cocheras de autobuses donde hay varios microbuses, así que he ido a escoger el que está en mejores condiciones... y he vuelto a casa inmediatamente porque no quiero estar mucho tiempo de "casa"... por decirlo así.

Después de colocarlo junto al pecho de mamá; inmediatamente me puse a trabajar en el vehículo; le he quitado todos los sillones para colocar unas colchonetas y así acomodar a toda mi familia; a mis chicas y a mis niños.

A ellas las he tumbado en los colchones y las he protegido también; poniendo unos almohadones en los laterales, pues las tengo que cuidar todo lo que pueda.


 Ellos son toda mi vida; y por seguridad a los bebés los he puesto en unas sillitas bien amarrados, para que no los vayan a aplastar sus mamás.

Estoy en marcha... pero tengo que parar mucho, los niños tienen que comer. 

¡Mierda! Ahora está lloviendo a mares....... es más, está diluviando, he parado en medio la carretera, así haré tiempo para darles de comer a los niños.

El tiempo se pasa volando, ya hace casi un mes que salí del centro comercial; el niño mayor no se está quieto en ningún sitio. 


Ya estoy llegando a Madrid... estoy buscando la Plaza de España y mi familia está muy bien y los niños estupendos.

He llegado a la plaza de España y he hecho lo mismo que en Córdoba, he buscado un centro comercial grande y lo he encontrado. Está cerrado; así pues, he roto la puerta con el micro bus, he acoplado a mis niñas y a mis niños; en un sitio acogedor.


Mis niños me tienen loco, gatean por todos los sitios... ya el más grande tiene un añito, me dispongo a cantarle el cumpleaños... cuando siento un ruido de un vehículo.


¡Guau! ¡No podría ir mejor! ¡Es Laura! Salí corriendo a buscarla y vi su coche venir de lejos, empecé a hacerle señas.

Ha llegado y se ha abrazado a mí, como si nos hubiéramos conocido de toda la vida. ¡Qué alegría me ha dado verla! Juntos hemos cantado los dos el cumpleaños... y todo ha sido maravilloso; pues Laura es preciosa, muy dulce y con un cuerpo maravilloso.

Ya es tarde, los niños están con sus mamás, tomando teta. Le he buscado a Laura un sitio en otro cuarto, al lado del mío, y le ha parecido bien.

Pero está asustada, creo que me ve muy mayor........ ya están todos acostados, muy tranquilos. Yo la verdad es que me siento de lo más relajado, a mis chicas las quiero a morir aunque no hablan ni nada, me han dado mucho y las quiero un montón.

Laura se ha dado cuenta de que las tengo desnudas, solo con unos pañales; sin embargo, aunque le ha sorprendido, no ha dicho nada.

Hemos estado toda la noche charlando de todo, de lo que ha vivido, y de cómo ha sobrevivido, hasta el amanecer.

He preparado café, más Laura se está durmiendo... está agotada, la dejaré dormir todo lo que necesite.

Me he tomado mi café y ya estoy liado con las mamás y los bebés; los cambio a todos de pañales y les estoy dando de comer. 

Son las cinco de la tarde y Laura se ha despertado, se me ha acercado y me ha dicho:
Que si no hay café para ella... ¡Oh sí! Ahora mismo... ¡Siéntate aquí!


Se ha sentado con un, atrévete muy cortito.
Ella me está mirando todo lo que hago. No le pediré que me ayude, pero ella se ha levantado y ha empezado a ayudarme.


 Es lista se va acostumbrando a mí, yo ya en un rato de relax que tenemos le he dicho:
Lo que ha pasado con las mamás; tenía que seguir con la raza humana... no podía dejar que el ser humano se extinga, pues depende la tierra de nosotros.


¡Yo sé que tú eres demasiado joven para mí, Bueno, venga chiquilla a dormir a tu cuarto! ¿Vale? Es muy tarde ya.


Todos durmiendo y muy tranquilo, yo estaba con los bebés tumbado en la cama; cuando de pronto en la puerta escucho... ¡Toc, toc! Y miro... cuando veo a Laura llamándome con el dedito en la cara, diciéndome ven, completamente en cueros.


¡Joder! Viendo ese cuerpo que tiene, no me atrevo ni a levantarme, me he quedado paralizado, ella se ha acercado hacia mí cogiéndome de la mano y llevándome con ella.

Yo no me atrevía ni a tocarla, es demasiado joven, me ha tumbado en su cama y se ha subido encima; me ha hecho el amor, y al final se ha quedado dormida y yo también. Es el placer más grande que jamás yo he tenido.

Ha sido fantástica, nos hemos quedado los dos juntos. Ella me está contando, el miedo que ha pasado, con la cabeza echada sobre mi hombro.


Para que lo lean en el espacio-tiempo, todo lo escrito es cierto. No permitáis que se invente este radiotelescopio; este escrito ha salido en el ordenador de Enricostro día 10 -2-2010
- Fin -


*Derechos Reservados*
Enrique Nieto Rubio.
Colabora en imagenes,
 Silvia Regina Cossio Camara.