A través de ti, mi buen amigo...
imposible se me hace,
no acordarme de ella.
Una hermosa dama,
entre miles de estrellas,
cariñosa en amores,
seductora en pasiones.
Solo a través de ti,
y de tus poemas, que son...
armoniosas notas de música,
en mis sentires.
Palabras que no siendo mías,
las hago propias;
pues tu sentir es el mío,
y tú morir también lo es.
Que si sufres por ella...
yo la deseo mucho más,
y si mueres por ella;
yo deseo hacerla solo mía.
Si tú pecas por su amor,
Yo rompería el pecado;
ensimismado en un mar,
de inconfesable pasión.
A través de ti,
sus pensamientos los hago míos,
sus suspiros los inhalo,
profundo en mis sentires.
De esas lágrimas,
que por tristeza de ella brotan...
las bebería, convirtiéndolas,
en sutil vino sagrado.
A través de ti,
mis pensamientos, los hago suyos,
y mi respirar,
se hace aún más grande,
en su sentir.
¡Sí! A través de ti,
que aún consciente de que la amas,
y que tanto la veneras;
en diamante, ella se convierte.
¡Amigo, el amor y pasión!
que por ella vivo,
¡es a través de ti.!
Y no serán solo tus pensamientos,
los que ella contendrá...
pues sin ti ella no es feliz,
pero sin mí, tú tampoco estarás.
¡Somos uno solo... aunque sé!
que solamente a través de ti! Amigo. SIR.
Enrique Nieto Rubio
Derechos Reservados
Colabora en imagen.
Silvia Regina Cossio Cámara.