Cuando todo va mal,
quisiéramos huir de todo,
evadirnos del mundo.
Huir, a donde el destino no nos recuerde,
donde las penas no lleguen.
hacia la niebla,
para que nada nos alcance.
Ese dolor que nos ahoga,
que nos asfixia,
ese dolor que no nos deja,
llorar siquiera.
Cuando todo va mal,
las alegrías se convierten en penas,
los gestos en lágrimas,
y ellas te ahogan en uno.
Es cuando todo va mal,
te hace sentir como un trapo viejo,
quieres huir del tiempo,
y no mirar hacia atrás,
pero el tiempo se pasa,
y mientras mueres en tu soñar.
Ya el tiempo se fue,
nada quieres recordar,
y los años también,
de que te sirvió llorar.
Ahora todo pasó,
y la vida también,
recordando todo lo bueno,
que pudiste, y que no fue.
Ahora recuerdas eso,
y lo que se dejó ayer,
pero solo cae una lágrima,
y quisieras volver.
Pero ya no se puede,
y te preguntas por qué,
si cambiarlo no quisiste,
y ahora lo quieres hacer.
Mejor es no recordar,
lo que dejamos ayer,
eso que fue un soñar,
y que ahora nada lo es.
Pues ya el tiempo pasó,
y el mundo se fue con él.
Los años ya te atraparon,
sin escaparte, pues,
y solo te queda ese haciento,
y nada puedes hacer.
Solo lloras en silencio,
de lo que pudo y nunca fue.
Enrique Nieto Rubio.
derechos de autor.
p,dy,doodo,y,co
No hay comentarios:
Publicar un comentario