En la inmensidad de la tierra,
aquí nace nuestro amor;
tú mirando mi sonrisa,
yo mirando dentro de tu corazón.
Sentimientos encontrados,
de un nuevo amanecer,
dos corazones soñados.
renaciendo fuertes del ayer.
Tú advirtiendo mi afecto,
yo sintiendo tu querer,
y viviendo los dos juntos,
para siempre envejecer.
Tú rozándome mi mano,
yo junto a los latidos de tu corazón,
caminaremos siempre de la mano,
como si fuéramos dos niños,
y siempre enamorados.
Enrique Nieto Rubio
*Derechos de Autor *
Colabora en imágenes,
Silvia Regina Cossio Cámara.
<Dedicado a Leonor,
mi querida hermana,
y su pareja>